jueves, 30 de marzo de 2017

No nos preparamos para vivir el futuro


Escribe Dr. Manuel Huanqui Hurtado

La era digital en la que vivimos inmersos es alucinante, y expectante,  pero, indiscutiblemente la más preocupante, y gracias   a la permanente  inquietud asumida por el hombre que se está proyectando con desafiante intención, que está sincronizando y orientando sus mejores  inquietudes a horizontes nunca intuidos ni jamás soñados por los que nos precedieron  a tal punto de que  la inteligencia de la que está previsto el hombre corre el riesgo de ser superada y suplantada por la inteligencia artificial adecuadamente sincronizada por cerebros insuflados de extremada paranoia, si no enmienda esta intención y tengamos que depender de ella y acceder a sus designios, de ocurrir este despropósito posiblemente sería el final apocalíptico de la aventura del hombre, para dar paso a otra era  que ya los cerebros más lúcidos la están intuyendo.

viernes, 24 de marzo de 2017

Las bestias del apocalipsis y el recalentamiento global


Escribe Manuel Huanqui Hurtado.

La permanente inquietud del hombre que inició su breve aventura en la cueva prehistórica hace más 100,000 años, y gracias a la participación de los personajes más emblemáticos de todos los tiempos y pigmentos que nos han precedido y que han aportado lo mejor de su sapiencia y experiencia, y que están recurriendo a memorias y codificadores de última generación y alta resolución que la era digital nos proporciona, ahora ya tenemos el espectro de los  escenarios y los entornos que cobijaron a nuestra  especie en el decurso del tiempo y que representa su única y última morada, y que constituye un milagro cósmico y que la insania y la ambición de algunos grupos étnicos que no admiten este designio y en el que se advierte un clamoroso deterioro genético, esto lo colegimos por la actitud que están asumiendo y que nos tratan de persuadir para que admitamos que ellos ostentan un aparente complejo de superioridad y so pretexto de que hemos ingresado a la era cibernética que conlleva un aparente progreso revestido de una parafernalia de lujo y boato, para satisfacer su insaciable ego,la tierra en que vivimos la están sobreexplotando, depredando, contaminando para que ellos vivan con un innecesario confort que está rompiendo todos los equilibrios que las leyes naturales le han adosado a nuestra tierra que ya no nos pertenece, y que los designios naturales le ha dotado de una especial capacidad de resiliencia para evitar su deterioro, y que la paranoia del hombre está acelerando su final apocalíptico, ante el asombro e impotencia de dioses y hombres, pobres y ricos.

martes, 21 de marzo de 2017

No nos preparamos para vivir el futuro

Artículo: No nos preparamos para vivir el futuro (obviamos el aspecto genético), escrito por el Dr. Manuel Huanqui Hurtado. Publicado en la revista sociocultural IBEROAMERICANA INTERNATIONAL.

lunes, 13 de marzo de 2017

La última carabela


Escribe Manuel Huanqui Hurtado
Doctor en Arqueología

Un 12 de Octubre de 1,492, de repente y ante el asombro de algunos nativos que habitaban en las islas del Caribe, y  que Dios no los había incluido en la hoja de ruta de su creación, descienden hombres despigmentados y con barbas de tres carabelas provenientes del Puerto de Palos de la península Ibérica, dicha travesía duro 69 días de atrevimiento, venían liderados por Cristóbal  Colón, provenían de una España que no ha mucho expulso a los árabes,   quienes  los sometieron pero muy sutilmente les adosaron su espectro cultural de una cobertura sin precedentes que aún pese al tiempo transcurrido no la han superado.

Cuidado con la catedral y la patina del tiempo


Escribe Manuel Huanqui Hurtado

El Perú es la presencia cultural de mayor trascendencia y connotación de esta parte de América Nuclear, y se desarrolló en el área que heredamos del Gran Tahuantinsuyo y su delimitación para ocuparla es la consecuencia  de un minucioso rastreo donde se optó por una adecuada prospección y proyección geopolítica única en América, que si bien es cierto es la más abrupta, agreste, difícil, incontrastable, en compensación a estas aparentes desventajas es la más segura, para que los grupos étnicos que la habiten se desarrollen no sólo en siglos sino también en milenios.  Y puedan disfrutar de gran variedad de pisos ecológicos, que van desde los cero metros hasta cerca a los 7,000 de altitud.

Nuestra cultura tiene una profundidad prehistórica de más de 22,000 años que recién se están  desvelando con la seriedad científica que precisa nuestro milenario ancestro, certificada con métodos radiactivos que no admiten duda.

La era digital y las guerras invisibles.


Escribe Manuel Huanqui Hurtado.
Doctor  en Arqueología.

Inspirado en la trascendencia de nuestra heredad,  que en la era digital  en la que vivimos inmersos adquiere especial connotación, y gracias a la complicidad de los científicos de la nueva generación quienes recurriendo a una sinergia sin precedentes, ya tienen codificados  en excelentes memorias de gran cobertura y alta resolución  las cifras y datos que se han rescatado de infinidad de yacimientos del pasado, donde el hombre que nos ha precedido  ha dejado su huella imborrable de todo lo material e inmaterial que ha concebido y que está siendo desvelado  recurriendo  al gen y al  átomo  y cuyos resultados  están causando asombro en la consenso de la cultura universal.

Pero, cuando por razones de mi obcecado amor por el pasado, vuelvo al escenario de la cueva prehistórica, ingreso con profundo  respeto y premunido de especial mística y devoción que estos ambientes nos deben merecer.

El panteísmo andino


Escribe Manuel Huanqui Hurtado.
Doctor  en  Arqueología.

Aunque algunos no lo quiera admitir, estamos viviendo en la era digital, que nos permite tener codificados en memorias de alta resolución las características de quienes fueron nuestros ancestros cuando nuestra especie inicia su breve aventura hace miles de años, y lógicamente nos deja traslucir que somos la consecuencia de un lento proceso de evolución que fue tan satanizado hasta no ha mucho, cuyo aporte se lo debemos a C. Darwin.

Como resultado de un minucioso rastreo científico, nos están desvelando que un grupo étnico de pigmento negro que apareció en el centro del África, fue posiblemente nuestro antecesor y nuestro abuelo fue del mismo color, porque ese entorno era el único encaje geográfico que le brindó las más mínimas condiciones para su sobrevivencia, debido a que el resto del planeta estaba cubierto de hielo, porque estábamos asistiendo a la era de las grandes glaciaciones, esto ocurrió hace más de 100,000 años, superado este trance inicia su migración a los diferentes continentes que estaban en su entorno, y en ese su fatigoso  y riesgoso nomadismo, se advierten cambios cualitativos y cuantitativos y  con la complicidad  de la orografía y la ecología se fue configurando su escultura que va definiendo y tipificando a cada  etnia y que fue factor decisivo que incidió en su paulatina despigmentación de su color inicial que fue negro, con la participación de la sustancia de la melanina que protege nuestra piel.

Más allá del arte


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Nuestra tierra, única morada, es un milagro cósmico, aún no se esclarecido plenamente, si su concepción se debió a un gesto divino, o es la consecuencia de los designios que le imprimió el universo, que supera todos los designios y que en su proceso de evolución ha propiciado la gestación de todos los cuerpos celestes que conforman nuestro entorno.

Pero, desde cuando el hombre inicia su breve aventura, es consciente que nuestra morada, constituye la escultura más maravillosa que las manos del tiempo las va perfilando, también representa un inconmensurable lienzo, donde convergen todos los pigmentos, tonos, matices, que la fotosíntesis y los rayos ultravioleta la iluminan plenamente, para que en la retina de nuestros ojos, se advierta sus perfiles, semejando una acuarela de singular acabado, y cuando se ausenta la luz, la noche le imprime sobrio contraste y uno puede admirar el horizonte oscuro del paisaje terreno, que le amplia el poliedro maravilloso de la belleza, que posibilita descubrir los otros sesgos del arte que pereciera que permanecen ocultos y poco a poco los advertimos y los admiramos.

Definitivamente no fuimos la mejor opción


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Lejos de todo dogmatismo, de toda obcecada concepción, o de algún infantilismo filosófico, carente del más mínimo sentido común, que nos impide y no nos permite develar la auténtica verdad del pasado del hombre, el enigma de nuestro origen aún sigue latente, urge encararlo con seriedad y sobriedad.

Esto nos induce a que tengamos que aceptar, que muchos grupos étnicos, aún no se han dado cuenta que estamos viviendo en el Siglo XXI, y que gracias a la destacada participación de hombres de ciencia, y como producto de serias investigaciones, ya se tienen codificadas infinidad de experiencias y vivencias de la cosmovisión de casi todos los grupos que en el devenir de la historia nos han precedido, también ya se tiene el listado de los grandes cataclismos, hecatombes, terremotos, fractura de continentes y otros eventos terráqueos y cósmicos que soportó y advirtió nuestro planeta desde sus inicios, se conoce también su cronología, para ello se ha recurrido a métodos radiactivos de datación del pasado, que nos refieren su antigüedad con gran aproximación.

viernes, 10 de marzo de 2017

El renacer de las etnias


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Han transcurrido más de 50,000 años, desde que el hombre inicia su breve y discutida aventura sobre la faz de la tierra, en ese lapso de tiempo los científicos sociales han determinado que las huella dejadas a su paso más de 2,000 generaciones, están plagadas de vivencias y experiencias, inventos y descubrimientos que han definido el sincretismo de cada etnia y que constituye su genuina cosmovisión, e intimidad cultural.

Pero, lo determinante de nuestra especie, es nuestra constitución biológica, antropológica y cultural. Pero, lo que define todo este universo de características, son los Genes y los Memes que son los componentes determinantes de la Etnia, a esto, se suman, costumbres, tradiciones, mitos, lenguas o dialectos, artes etc., etc.

Los hijos de la ubre y los hijos de la urbe


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Es increíble que dos palabras conformadas por cuatro letras de nuestro alfabeto, que comienzan y terminan con las mismas vocales, y se advierta casi imperceptiblemente la disposición de las dos consonantes, cada una de ellas, en su interpretación y mensaje, cada una tenga un significado diametralmente opuesto y encierren y resuman ambas palabras, una constelación de inquietudes, vivencias, comportamientos, gestos, aspiraciones, actitudes, traumas, frustraciones, increíblemente antagónicas.

Hay millones de hijos que han nacido, vivido y muerto en esta tierra, que es un milagro cósmico, desde hace más de 2,000 generaciones, a los que los hemos agrupado por la actitud que asumen en dos, a unos los más conscientes, los hemos denominado como los hijos de la Pacha Mama o hijos de la tierra, y a los otros obcecados, cuyos gestos derivan en una insana e irreversible actitud, los hemos bautizado como los hijos de la urbe.

jueves, 9 de marzo de 2017

Etnia o nacionalidad


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Nadie se imaginó que el siglo XXI, nos iba a brindar la oportunidad y el privilegio de disfrutar, y el de ser actores y testigos del mejor momento de la historia y paradójicamente ser conscientes que también estemos viviendo el peor instante de todos los que nos han precedido, porque está salpicado de horror, ambición, frustración, angustia y muerte.

Gracias a los últimos sondeos y estudios realizados por destacados especialistas, nos develan, que felizmente con el SIGLO XX, han muerto muchos mitos, dogmas, teorías, especulaciones, y designios etéreos, que distorsionaron el verdadero mensaje del pasado, que nos legó el hombre prehistórico y que recién se empieza a revalorar la auténtica trascendencia que ostentó, porque gracias a su gesto sacrificado y riesgoso, somos actores y testigos de esta aventura.

Arequipa: “República independiente”


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Quienes provenimos de auténticos arequipeños, podemos considerarnos genéticamente hijos de este pueblo, altanero, revolucionario, místico, telúrico, mágico, esotérico, y además porque sus hijos están premunidos de especial dosis de imaginación e inquebrantable voluntad para encarar con serenidad los designios naturales y las consecuencias de los desaciertos de algunos personajes que fungen de gobernantes, debido a que no poseen ni talla, ni estatura de estadistas y cuyos gestos precipitan el descontento popular y que con centrado criterio político y jurídico, siempre Arequipa capitaliza, y en nombre del Perú asume su defensa.

Desde hace medio siglo, somos testigo y actores de su incomparable historia, y por la trascendencia que ostenta este pueblo, me inspiró a dedicarle los mejores años de mi vida a hurgar y penetrar en los estratos más profundos de su pasado, y hemos extraído evidencias materiales que constituyen las fuentes irrefutables de su auténtica historia.

Autoridad sin autoridad


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

De un tiempo a esta parte la palabra autoridad va perdiendo vigencia, el diccionario de la lengua castellana la define como adjetivo y una de sus opciones nos ofrece el siguiente significado: Prestigio, que se reconoce a una persona por sus conocimientos y cualidades.

Desde los albores de la civilización los diferentes grupos étnicos que concibieron sus manifestaciones culturales, su única preocupación para sobrevivir, era elegir, seleccionar, ubicar a personajes que reúnan especiales atributos, para encomendarles la conducción del grupo, para lograr el éxito requerido.

Como resultado de los estudios realizados por eminentes escrutadores de la historia, coligen que el segmento del pasado conocido como prehistórico.

Observaciones y sugerencias a la legislación sobre el patrimonio arqueológico nacional

Dr. Manuel Huanqui hurtado

Conclusiones

Primero.- El desconocimiento del auténtico valor que poseen reliquias del pasado, por parte de un elevado número de peruanos, la poca sensibilidad de los que desde épocas muy remotas iniciaron la destrucción de nuestro Patrimonio Arqueológico Nacional y la ambición de enriquecerse a costa de especímenes de manufactura precolombina, ha sido un factor determinante, para que no se le respetara y contribuyo para que muchos recintos arqueológicos hayan sido un factor determinante, para que no se le respetara y contribuyo para que muchos recintos arqueológicos hayan sido saqueados y algunos ya han desaparecido, cuya perdida lamentablemente es invalorable e irreparable.

Segunda.- La falta de una adecuada orientación y una mejor difusión de los principales dispositivos legales, a la vez que había que facilitarles los requisitos mínimos para que cumplan con la ley y la demasiada prudencia de las autoridades que estuvieron a cargo de su defensa y protección, están acelerando la destrucción de nuestro Patrimonio Arqueológico Nacional.

El oro de Arequipa: osamentas y ceramios con mensaje ancestral

Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Hasta no hace mucho el pasado de los pueblos se interpretaba recurriendo a fuentes susceptibles de distorsión e inexplicablemente se marginaban las evidencias materiales, que paradójicamente son las que conservan con extra­ordinaria fidelidad las huellas del pasado. Arequipa es un enclave interandino que ostenta infi­nidad de muestras del pasado de diversa manufactura y antigüedad, unas obtenidas casualmente y otras rescatadas técnicamente por acción especialista y estudiosa, pero que lamentablemente el porcentaje de estas muestras es ínfimo y un volumen aun no precisado se encuentra en los estratos de la tierra. Gracias al lenguaje sobrio y contundente con que nos hablan estas evidencias ma­teriales, nos revelan la ver­dadera profundidad pre­histórica de los pueblos, y en especial de Arequipa, que sobrepasa largamente los 10,000 años, cotejado con los relojes radioactivos. Cuando de repente irrumpe el conquistador un 15 de agosto de 1540 en este valle de paradisíacos encantos y toman posesión de estos territorios en nombre de sus católicos Reyes y de in­mediato implantan una arquitectura de autoridad erigiendo palacios, castillos, mansiones, monasterios, conventos, templos y la catedral, amén de casonas solariegas, en toda el área de lo que hoy se conoce como la Arequipa Cuadrada, Esta actitud define parte de su impronta y constituye el segmento más reciente de su historia. Por estos perfiles de soberbia monumentalidad que nos legaron, se pensó y nos hacían intuir que la historia de este pueblo se iniciaba recién en esa fecha que plantan la cruz apoyados por la espada, imbuidos y premunidos también de un acendrado sentimiento religioso.

Arqueología y geopolítica


Dr. Manuel Huanqui Hurtado *

Nadie se imaginó que la fecunda imaginación de Julio Verne, H.G. Wells y otros visionarios que lindaban con la ciencia ficción, y que prácticamente era 'imposible concretar, dichas intuiciones ahora, gracias a la permanente inquietud del hombre, todo lo que en otros tiempos imaginaron, ahora se concretó, ante el asombro de obcecados dogmáticos, y ortodoxos, amén de científicos, ateos y creyentes.

El salto cualitativo y cuantitativo que ha dado el hombre, desde los albores de la civilización, que se inicia con señales de humo para derivar en la vía satélite, de la cueva prehistórica al hotel más lujoso, de¡ mundo el Imperial Palace que está en las Bahamas y pernoctar una noche en una suite, cuesta la mísera suma de $ 27000.00 dólares esto hace tiempo y sin IGV, M arte rupestre prehistórico al offset, de la punta pétrea de proyectil que utilizó el hombre de las cavernas para protegerse de las fieras que inquietaban su entorno, a las bombas bioquímicas, M tatuaje al maquillaje, de la telepatía al teléfono celular, de la imaginación al video, de la magia a la ciencia, del mimo al lenguaje articulado, etc.

Los genes y memes de la cultura andina


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Estamos viviendo la primera década del siglo XXI, aparentemente en el mejor momento de la historia, e in­creíblemente estamos sumi­dos en una obcecada adicción tecnológica, que preocupa e inquieta, pero también tene­mos que reconocer que vivi­mos el peor momento de todos que nos precedido, por la obcecada irresponsabilidad de nuestros semejantes, que viven dopados de extremada inconsciencia, que nos está conduciendo al hoyo de la in­mensa sepultura, como ya lo intuyera el poeta universal, César Vallejo.

La permanente inquietud del hombre que nos ha precedido, desde el instante que inicia su breve aventura, acosado por las circunstancias, ha logrado dar grandes saltos cualitativos y cuantitativos, que los herederos de nuestra  cultura no han sabido aprovechar, especialmente aquellos que tienen singular cobertura social y proyección científica.

Del derecho tradicional, al derecho genético parte II


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Al respecto existen viven­cias y actitudes del hombre, que han ocurrido en las difer­entes etapas de la historia, las que están codificadas y men­cionaremos algunas que se han suscitado y las hemos es­crutado, hechos que nos invitan a la reflexión, y que nos han preocupado como es el caso, de que hace no ha mucho, cuando un próspero industrial europeo, que había conformado un familia dentro de los patrones establecidos, y con el correr del tiempo su esposa concibió una niña, pero, estos personajes que tienen a su merced un buen potencial económico y por esta razón pueden acceder a todos los seguros, cuidados, asistencia y chequeos perma­nentes, le diagnosticaron al esposo, pese a su juventud, un cáncer a la próstata, y que le daban un margen suficiente de tiempo, como para que él tome las precauciones y decisiones pertinentes, premu­nido de un gran sentido de proyección genética, porque dicho de otra manera, este prominente industrial, ya tenía fecha de vencimiento para seguir viviendo, y ante este anuncio había que tomar una decisión sobria y serena.

La rebelión de los Virus


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Más de 50.000 años nos separan, desde que el hombre se cobijó en una cueva prehistórica, para Iniciar su breve aventura, en esa oportunidad la población del mundo no excedía de 10,000 habitantes, ahora somos más de 6´300.000.000 y cada día nacen más de 20`000.000 y la población crece en una progresión incontenible e incontrolable.

Desde ese entonces, se han dado gracias a la inquietud del hombre, saltos cualitativos y cuantitativos que han superado ampliamente la más fecunda imaginación, como lo ocurrido en las comunicaciones, que de las señales de humo, hemos derivado a la vía satélite, del kipu a la computadora, y el icono desde siempre ha sido y es el medio más contundente en el campo de las comunicaciones, a las que le han adosado líneas, colores y proporciones bien definidas, y esta expresión gráfica constituye el sincretismo de más de 3,200 dialectos y 800 idiomas concebidas por todas las generaciones que nos han precedido, y esta forma de comunicación ancestral, retorna en el Siglo XXI, con extraordinaria cobertura.

Del derecho tradicional al derecho genético


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

La permanente y desafiante inquietud del hombre, nos está permitiendo llegar a horizontes científicos de una cobertura sin precedentes, nunca antes intuida, debido a que el dogmatismo imperante en los siglos que nos han precedido, nos mantuvieron en un completo oscurantismo, que propicio la concepción de cosmovisiones del mundo carentes de sustento científico y que el hombre se vio en la imperiosa necesidad de acceder a dichas especulaciones, que nos han persuadido insistentemente a que tengamos que admitir y adoptar una cultura de resignación, superstición y miedo, y así ha transcurrido por muchos siglos la vida del hombre, único actor y testigo de su propia historia.

Las antiguas civilizaciones eran obcecadamente panteístas, que solo admitían serenamente los designios naturales, que las admitían porque eran la consecuencia de los ciclos y periodos del engranaje cósmico, y se resistían a acceder a los caprichos humanos, que son susceptibles a cambios repentinos, extremadamente sesgados y sin cobertura social, y que lamentablemente han definido el destino de muchas etnias, algunas lideradas por personajes insuflados de extremada insania, que han conducido a sus pueblos a reprochables holocaustos; que el espectro de la historia los tiene codificados y los ha condenado.

Minusvalía adquirida en Arequipa de hace mil años era del 0.54 %, para una población de 6,000


Extracto del libro próximo a salir:
“HABLAN MIL MOMIAS,
DESPÙES DEL MIL AÑOS”

Dr. Manuel Huanqui Hurtado.

Aun, existen algunos aficionados dedicados al estudio del pasado, y que creen todavía que la Arqueología, de la cual desconocen su verdadera proyección científica, es una disciplina, que se dedica a la recolección de iconos y evidencias materiales, y que mal confrontadas les da la oportunidad de esbozar propuestas e intuir teorías, elaborar esquemas, bosquejan cronogramas, diseñan cuadros donde tentativamente se pretende interpretar nuestro glorioso y complejo pasado., y tratan de semejarse a los doctores de la iglesia y se dedican a bautizar con nombres muy sugestivos, los sitios y lugares de trascendencia y se atribuyen tener la patente de ser los personajes más representativos y se consideran los predestinados para digitar la política cultural, en base a la arqueología.

Semblanza de Arequipa


En
los estratos mas profundos , de los antiguos patios de casonas de monumental
arquitectura barroca y mestiza, aun se encuentran las evidencias materiales
que nos legaron los collaguas, grupo étnico que imprimió singular impronta a
su arte y arquitectura, que sirvió de perfil a la primera fundación de
arequipa.

Posteriormente en el mismo entorno natural salpicado de incomparables
paisajes, las huestes incas consuman la segunda fundación.

De
repente y ante el asombro de quienes ya moraban este valle , occidente

irrumpe con símbolos cristianos y una arquitectura de autoridad,...

Arequipa: ciudad hecha de luz


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

La breve aventura del hombre, que hasta no ha mucho, constituía un enigma, pero, gracias a la ciencia y hombres de talento, que se han despojado de todo obcecado dogmatismo, están penetrando con minuciosa acuciosidad a los estratos de la tierra y rescatan evidencias materiales que constituyen fuentes irrefutables, que se conjugan con las escritas y orales, gracias a esta actitud que ha asumido el hombre, es que recién se está sincronizando todo este universo de elementos diagnósticos, que está posibilitando develar la auténtica trama del que hacer de los pueblos, que desde épocas pretéritas nos legaron sus valiosas experiencias, a esto tenemos que agregar muy sutilmente, lo referente a la cronología, que por ignorancia, se distorsiono clamorosamente la secuencia de anterioridad y posterioridad, que ha conducido a que doctos, eruditos, profanos, ortodoxos sin marginar al ciudadano común y corriente, se haya estado interpretado el pasado y la historia de las etnias, con inaceptables incongruencias y clamorosas distorsiones, que ha desviado o distraído el verdadero propósito del hombre que nos precedió, único actor y testigo de su propia epopeya, y que gracias a los relojes radioactivos, ahora ya se tiene el perfil secuencial de la cronología de todas las presencias culturales que poblaron nuestra tierra, hoy lamentablemente depredada maltratada, y que se le ha diagnosticado que adolece irremediablemente de un mal terminal, por la insensibilidad del hombre.

Las edades de la historia


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Gracias a la tecnología de punta, que la inquietud del hombre ha concebido, paradójicamente la ciencia de la Arqueología, aprovecha todo ese universo de inventos, descubrimientos y experiencias, para hurgar y develar algunos enigmas del pasado, y como referencia podemos manifestar, que parte de ese instrumental de alta tecnología, se ha puesto al servicio del rastreo del pasado, mencionaremos algunos de estos portentosos aportes, por ejemplo, ya se tiene las fotos tomadas de satélite, con la técnica de infrarrojo falso color y que nos proporciona el espectro de la tierra, que nos está develando sus propiedades y características, con la transparencia que se precisaba, se está recurriendo a las radiografías con resonancia magnética, con las que se está penetrando sigilosamente a las intimidades de la anatomía humana, y se está escrutando los órganos más sensibles, como son el cerebro, el corazón, el hígado, los riñones etc., etc., y que antes nunca fueron ollados, y nos está proporcionando valiosas referencias que la ciencia codifica con la finalidad de tener un mejor conocimiento del perfil del genoma humano, que nos amplía con extraordinaria fidelidad, y gran cobertura la verdadera actitud que asumieron nuestros ancestros desde épocas pretéritas, hasta nuestros días, donde está resumida su breve aventura.

martes, 7 de marzo de 2017

El silencio de la momia

Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Este ensayo fue publicado en mi condición de Miembro del Patronato de Defensa del Patrimonio Cultural de Arequipa a raíz del maltrato, que estaba siendo objeto el cuerpo congelado de la ñusta del Ampato, por parte de instituciones y personas que se atribuyeron representatividad de la región, en abierta complicidad con personajes, que con su silencio avalaron este acto de lesa cultura.

Nos opusimos que la traten como vulgar souvenir, inclusive que viajara a U.S.A., de no mediar antes un convenio y la autorización de un auténtico Patronato que velara por la integridad de nuestra heredad; pese a ello procedieron con criterio mercantilista, asumieron actitudes protagónicas. Inclusive en nuestra condición de especialistas dimos las recomendaciones pertinentes y como cínica respuesta recibimos el mutis e indiferencia lindante con la negligencia.

Pese a ello, estamos gratamente reconfortados, quienes vivimos convencidos plenamente de la trascendencia y singular connotación de nuestra heredad, de los orígenes y proyección de nuestra cultura, que algunos escépticos recién revaloran gracias al lenguaje de las momias.

Más respeto por los muertos, exigen los auténticos peruanos


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Esta opinión es un apéndice a la tercera edición de esta separata, después que el cuerpo congelado de la Momia del Ampato regresó de U.S.A.

Lamentablemente, pese a nuestra a lo mejor obcecada oposición, nuevamente se la llevan al Japón. Esto sólo sucede en el Perú, porque carecemos de auténtica identidad cultural, pese a que nuestro país ostenta los testimonios arqueológicos de mayor cobertura científica de América, que resume la mejor de las experiencias culturales de esta parte del mundo.

Pero, increíblemente y paradójicamente, no cuenta con la legislación acorde a la connotación de nuestro Sagrado Patrimonio Arqueológico, debido a la insensibilidad y desconocimiento de los fundamentos científicos, culturales y étnicos de nuestros ancestros.

Juli: la Roma aymara de América


Antes de ahora nadie se imaginó que las evidencias materiales que nos legaron nuestros ancestros, iba a tener la trascendencia que ahora se les otorga, para interpretar al autentica y más trasparente historia de América.

El pueblo de Juli es tan solo un hito pero posiblemente el más determinante en el área del altiplano, donde aún pululan otros dioses, en singular simbiosis con los Apus.

Cusco magnético: opiniones del milenio

No hay texto alternativo automático disponible.
Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Gracias a los últimos sondeos en los agujeros negros del universo, que realizan hombres de ciencia premunidos de sofisticado instrumental, ya se tiene el espectro de nuestro sistema solar, su verdadera configuración, distancias que separan una galaxia de otra, ciclos de rotación, períodos de inclinación, movimientos de traslación, inclinación, presesión, desplazamiento geomagnético, ocurrencias cósmicas etc. etc., que están registradas en memorias electrónicas.

Se está sincronizando con suma cautela toda la información de los movimientos de galaxias y cuerpos celestes del universo, las causas que originan el nacimiento o extinción, y se está llegando a la conclusión que existe matemática relación entre volúmenes, velocidades, distancias, fuerzas magnéticas, proximidad o lejanía de cuerpos celestes que configuran el espectro del universo, acontecimientos que ocurren con los astros, que precipitan los grandes cambios geológicos, ecológicos y gravitacionales, que definen el comportamiento de cada planeta.

Arequipa Kolla


Dr. Manuel Huanqui Hurtado

Los antecedentes y las evidencias materiales rescatadas de la región Arequipa nos muestran y certifican que su antigüedad se remontan a más de diez mil años.

Para lograr el perfil cultural de Arequipa se están sincronizando los aportes que nos brinda el geomagnetismo, la paleóclimatología y la arqueología. La primera de las mencionadas muestra transparentemente que la reversión de los polos magnéticos está registrada con extraordinaria precisión en los andenes por cerca de diez mil años. la climatología se refiere a todos los climas que se han registrado en Arequipa después de las violentas convulsiones sísmicas que inquietaron a los primeros pobladores de este valle donde hace seis mil años dejaron estas vibraciones de ser intensas, lo cual permitió la ocupación de este valle por parte de grupos étnicos que provenían de la región Wari cuyo epicentro cultural está en Ayacucho, el otro flujo que incidió en su perfil cultural fuel que provino del Kollasuyo; representado por los grupos étnicos de origen Aymara que fueron los primeros en ocupar estos territorios.

Machupicchu: perfil arqueológico inimitable e incomparable


Manuel Huanqui Hurtado

Machupicchu, representa en el consenso de la cultura universal, uno de los perfiles arquitectónicos y arqueológicos de mayor connotación, dotado de un colosalismo y monumentalidad nunca antes concebida ni igualada por otras civilizaciones.

Constituye el hito más trascendental, el de mayor singularidad de todos cuanto existen en este hemisferio.

La ciudadela precolombina de Machupicchu, considerada por los más prominentes expertos, como la semblanza arquitectónica de inigualable perfil, premunida de singular majestuosidad, ostenta impresionantes paisajes que le imprimen a su entorno especial equilibrio ecológico y magnético, en comparación a otros que constituyen los más representativos de la Cultura Universal.